martes, 18 de marzo de 2008

Mi apoyo a Armando y al Athletic.

Quiero mostrar públicamente mi apoyo a Armando Riveiro y al Athletic.

Supongo que a estas alturas todos estaréis enterados de la terrible agresión que sufrió el guardameta de Los Leones en el estadio del Betis. Hoy se reune el comité de competición y, se supone, valorará el hecho y la sanción que debe serle impuesta al club sevillano.
Presumiblemente se cometerá una injusticia para con el Athletic: Se tendrán que jugar los 20 minutos de partido que quedan y sólo obligarán al Real Betis a desplazarse a otro estadio que no sea el suyo; sanción ridícula teniendo en cuenta que jugarán en su misma ciudad a un par de kilómetros de su estadio como ya hicieran en otra ocasión. El Betis, que no tiene nada que perder y todo que ganar, jugará 20 minutos con 6 delanteros y a intentar ganar. ¿Se recompensará al infractor? Yo creo que sí.

¿Qué ha pasado en el Betis para que, de ser el equipo simpático y humilde -en cuanto a la gente, no en fútbol ni fichajes- haya pasado a ser una de las aficiones más ofensivas, agresivas, faltonas y temibles, y que su estadio sea de alto riesgo? En los últimos años las agresiones se han multiplicado, la afición es beligerante y peligrosa. ¿Que qué ha pasado? os lo diré claro: Manuel Ruíz de Lopera.
Desde que este tipo, especie de dictador fascistoide, megalómano y ofensor, esta repugnante mezcla de Mussolini y Doña Rogelia, se ha encargado, desde su púlpito dorado de presidente-dueño del Real Betis, de arengar a los más violentos y radicales de su afición, a justificar sus conducta de bestias descalificando y despreciando a árbitros y rivales. Cantando el pobrecito yo, que me echan la bronca.
Claro ejemplo de esto pudimos ver el sábado, cuando uno de los dirigentes del Betis dijo, y cito textualente, que "la gran víctima de esto es el Betis". Con dos cojones y un palito, mi amigo el sevillanito.

Los hechos son muy graves, compadres. No sólo casi le saltan un ojo al portero y, con todos mis buenos deseos por delante, aún no se sabe si podrá seguir desempeñando su trabajo con total normalidad, como antes de la agresión. Por si esto no hubiera sido suficiente, al salir todos los jugadores, incluido Armando, tuvieron que sufrir insultos y amenazas de cientos de béticos, algunos neonazis, otros simplemente gilipollas. Y después, a por los periodístas vascos desplazados: Jose Iragorri, Alberto Negro,... ¡Los periodistas tuvieron que ser escoltados por la policia mientras unos hijos de puta gritaban sig heil!

Debería darse el partido por ganado 0-3, clausurar el estadio Ruiz de Lopera y restarles 6 puntos en la clasificación; uno por cada punto de sutura que han dado a nuestro portero.
Pero me temo que quedará en una multita de 5000€ y que jueguen un par de partidos en el estadio de La Cartuja que, además, está en mucho mejor estado de conservación.
¡Qué barato sale ser un hijo de puta!

¡Ánimo, Armando! Aupa Athletic!

Edición: De mano de Master_dame_PX un documental de un montón de gorilas béticos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo de la verdadera victima soy yo... me suena demasiado al hijoputa que atropelló a Enaitz... Él también decía que la verdadera víctima era él y su coche (no se si en ese orden). Serán familia?? serán todos sevillanos y calor del sol les atrofia el cerebro?? Aunque pensándolo bien, los africanos soportan más sol ....
Ya esta!! es la mezcla de ser español y del sur!!! pobres, ellos no tienen la culpa.....

Anónimo dijo...

Por desgracia hay mucho energúmeno suelto por el mundo. Y no sé por qué, pero parece que el 90% tiene coche y el otro 90% va a ver fútbol.
Sí, ya sé que eso da un 180%, pero es que los hay a patadas!!
Mis mejores deseos también para el portero. Espero que ganen el partido por lo menos.